domingo, 24 de junio de 2007

Publicación Diario La Nación

Mercado laboral
Hay vacantes, no hay postulantes

Qué pueden hacer las empresas para solucionar este problema tan actual

En los últimos años, el concepto de empleabilidad fue muy utilizado en el área de RR.HH. Se lo define como la posibilidad de conseguir un trabajo, o conservar el que se tiene.
Cuando se realiza el análisis de este término se dice que está compuesto no sólo por los conocimientos, habilidades y aptitudes, sino también por las actitudes, los valores y el compromiso. Estas características en su conjunto son denominadas competencias.
Cada uno debería conocer y evaluar cuáles de esos factores tiene y utilizar los medios más adecuados para dirigirse al mercado que pueda requerirlos. Siempre se hace hincapié en la idea de que podemos mejorar las competencias, desarrollarlas de acuerdo con lo que el mercado laboral demanda. También se insiste en que el mercado -en este caso las empresas- es algo dado, que no puede cambiarse.
En nuestro país hay gente que no consigue trabajo, pero se presenta la paradoja de que las compañías tienen vacantes que no pueden cubrir, situación que en algunos casos dura meses y que tiende a agravarse.
Ante el panorama actual, las alternativas posibles son dos:

· limitarse a la queja respecto del carácter inadecuado de los perfiles disponibles;
· trabajar de manera activa sobre la fuerza laboral existente.

Algunas empresas optaron por la segunda alternativa y crearon programas a los efectos de trabajar activamente en el desarrollo de aquellas personas que no cumplen con las características requeridas.
Tal vez haya llegado el momento de invertir la afirmación y decir que las empresas también tienen que adaptarse al mercado laboral y trabajar con lo que éste ofrece.
Algunas organizaciones instrumentaron este nuevo proceso y están dispuestas a contratar postulantes a los que puede brindarse capacitación y desarrollo cuando los mismos no se ajustan a lo solicitado para determinados puestos. No son objetivos que puedan alcanzarse a corto plazo, pero se trata de la solución más viable para superar la situación actual.

Por Adriana Ceraso
Para LA NACION SABADO 23 de Junio de 2007

La autora es profesora de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Palermo